"Muy buenas noches Dos Hermanas...." en julio pasaron 30 años del concierto que así empezaba, concierto que muchos años después era impensable que se pudiera repetir a dos calles de casa.
Este verano hizo la friolera de 30 años desde que la legendaria banda de Juan Valdivia y Enrique Bunbury decidieron hacer una parada en nuestra ciudad, eran principios de los noventa y aun teníamos la resaca de la reciente Expo'92, de nuestros vecinos de la capital, recinto que poco nazareno se quedó sin pisar.
Más concretamente el dieciséis de julio, un dieciséis de julio en el que con poco más de quince años podía saltar en las gradas del auditorio del parque de la Alquería, entre cientos de personas llegadas desde muchos puntos cercanos y no tan cercanos, además de muchos amigos nazarenos, una edad con la que hoy en día sería difícil dejar a un chico quinceañero meterse en un tumulto de tal calibre sin poner el grito en el cielo o encomendarse a esos mismos cielos para que no regresara magullado o a saber con qué desdicha encima, pero ahí estábamos. Eran otros tiempos, qué tiempos...
Quizá fuese la segunda o tercera gira detrás del magnífico álbum de Senderos de Traición y tal cual se llamaba su gira, la de los Héroes del Silencio, que ya en esos tiempos iban arrastrando una pequeña legión de seguidores que iría aumentando exponencialmente con el paso de los años. Tres veces pude disfrutarlos, una de ellas en la gira de despedida, pero el recuerdo del concierto en mi ciudad, en mi pueblo, mi primer concierto de rock, ese momento creo que muchos lo llevamos como un parche en nuestra mochila o chaqueta vaquera o de cuero, del que siempre íbamos a estar orgullosos (aun no era el momento del tatuaje cotidiano y normalizado). A final de ese mismo año volvieron a golpear nuestras almas con El Espíritu del Vino, álbum que no solo rompió en nuestro país, sino que arrasó en lugares como Austria, Alemania o Suiza.
Quién no recuerda los títulos Entre dos tierras, Oración o Maldito duende, de sus primeros álbumes, que deleitaron y saciaron la sed de buen rock español que necesitaba el público allí presente.
Maldito Duende - Héroes del Silencio - Dos Hermanas, Sevilla 16/07/1993
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Héroes del Silencio fue un grupo español de rock surgido en Zaragoza, formado inicialmente por Juan Valdivia (guitarra solista) y Enrique Ortiz de Landázuri conocido como Enrique Bunbury (voz y guitarra rítmica), con Joaquín Cardiel (bajo) y Pedro Andreu (batería), a partir de mediados de los años 80, y fue en ese momento cuando cambiaría para siempre la historia de la música española.
En una trayectoria no excesivamente larga, de solamente doce años entre 1984 a 1996, por desgracia no infinita como todos queríamos, hicieron casi mil conciertos y recopilaron en su camino una gran cantidad de material repartidos en 4 álbumes de estudio, 6 en directo y otros 6 recopilatorios, vendiendo mas de seis millones de discos.
Por suerte para todos sus seguidores hubo una última oportunidad de poder disfrutarlos en una gira cuando se reunieron en 2007, donde visitaron ciudad de Guatemala, México D.F., Buenos Aires, Los Ángeles o su ciudad natal Zaragoza entre otros, pero todos nosotros solo tuvimos que recorrer en coche 14 kilómetros desde casa para poder disfrutarlos en un abarrotado estadio Olímpico, aunque en mi caso unos 1300 kilómetros desde Canarias con la excusa de una boda familiar ficticia en el trabajo, para no perderme tal acontecimiento y poder cerrar el círculo. Aun con un final apoteósico para la banda, nada podría igualar esa noche veraniega de rock nazarena de principios de los noventa.
Héroes del Silencio - Dos Hermanas, Sevilla 16/07/1993
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