Falito Acosta toca el cielo en Dos Hermanas: Europa se rinde ante el corazón nazareno

Hay noches que nacen para ser eternas, y la del pasado 6 de diciembre de 2025 en el Pabellón Municipal Los Montecillos fue una de ellas. No fue solo una velada de boxeo; fue la confirmación del buen hacer en el sector de un deportista que ha sabido ganarse el respeto de todos, tanto dentro como fuera del ring.

Rafael Acosta "Falito", arropado por el calor de su gente, escribió la página más brillante de su carrera al proclamarse Campeón de Europa (EBU) del peso ligero. Una victoria que va más allá del cinturón: es el triunfo de la constancia, la humildad y la conexión con una afición que no dejó de vibrar ni un solo segundo.

Lo que vivimos en Dos Hermanas fue pura magia. Cerca de 2.000 personas abarrotaron el recinto, no solo para ver un combate, sino para corroborar las opiniones que sitúan a Falito como uno de los grandes referentes del deporte andaluz. El ambiente fue eléctrico, de esos que ponen la piel de gallina, demostrando el trato cercano y humano que el boxeador siempre ha tenido con sus vecinos.

Desde que sonó la primera campana, Acosta salió decidido a no dejar escapar su sueño. Frente a él, un veterano curtido como el catalán Frank Urquiaga, que exigió la mejor versión del sevillano. Pero Falito, con una madurez impropia de su edad, impuso su ley:

• Presión constante: Dominando el centro del ring.

• Inteligencia táctica: Buscando el cuerpo y frenando a su rival.

• Corazón: Manteniendo el ritmo durante los doce asaltos.

La superioridad de Falito fue incontestable, pero siempre desde el respeto al rival, un valor que engrandece aún más su figura. Aunque Urquiaga intentó reaccionar en el tramo final tirando de experiencia, el nazareno supo gestionar los tiempos con una frialdad de campeón.

Las cartulinas de los jueces no dejaron lugar a dudas y reflejaron la realidad de lo vivido sobre la lona: 118-110, 118-110 y 117-111. Una decisión unánime que desató la euforia en las gradas y confirmó que el título se quedaba en casa.

Es emocionante ver cómo se rompen barreras. Con este cinturón, Falito Acosta se convierte en el primer boxeador sevillano en alzarse con el título europeo absoluto. Un logro que pone a Dos Hermanas en el mapa continental del boxeo y que sirve de inspiración para las nuevas generaciones.

Es el premio a años de sacrificio, de entrenamientos en la sombra y de una pasión inquebrantable por su oficio. Falito ha demostrado que, con trabajo y el apoyo de los tuyos, no hay meta inalcanzable.

Ahora, con el cinturón en la cintura y el cariño de su gente en el corazón, el horizonte se abre de par en par. Su equipo ya mira de reojo una posible defensa ante el campeón de España, Jokin García, en lo que sería una revancha de alto voltaje tras aquel duelo de 2024.

Pero eso será mañana. Hoy toca celebrar que tenemos un campeón de Europa que, además de ser un atleta excepcional, es una persona que derrocha humanidad. ¡Enhorabuena, Falito!