Dos Hermanas vivió uno de los días más grandes en su historia con la celebración de la Salida Extraordinaria de Santa Ana por los V Siglos de Hermandad.
Todo comenzaba a las 19:00 horas con una Solemne Misa de Estacional presidida por el Arzobispo de Sevilla D. José Ángel Saiz Meneses, en la Parroquia de Santa María Magdalena. A continuación un numeroso mar de nazarenos esperaba a las puertas de la parroquia para acompañar a lo grande a la Patrona por las calles de Dos Hermanas. Todas las Hermandades, Agrupaciones Parroquiales y Asociaciones, así como la Policía Nacional, Local y representantes municipales formaron el cortejo oficial hasta la Plaza de la Mina donde formando un pasillo con sus estandartes y representaciones arroparon el paso de Santa Ana.
Unos de los grandes momentos de tal extraordinaria efeméride lo formaron las Corporaciones Musicales de Dos Hermanas que interpretaron marchas en distintos puntos del recorrido para rendir homenaje a la Patrona. Así lo hicieron la Banda de Música de Santa Ana que acompañó durante todo el recorrido el paso de la Santa Patrona. Estrenando además la Marcha oficial del V Centenario Antigua y Real obra de Pablo Casado Cebrián.
La Banda de Cornetas y Tambores de Presentación al Pueblo que abrió el cortejo, en el cruce de la Calle Romera con Canónico le interpretó varias marchas donde Santa Ana se puso frente a frente a la banda como hizo con el resto de corporaciones musicales. La banda de cornetas y tambores Entre Azahares tocó en el cruce de las calles Antonia Díaz con Manuel de Falla. Antes de transitar por la calle Santa María Magdalena lo hizo la Agrupación Nuestra Señora de Valme. En el cruce de la calle Rivas con Santa María Magdalena fue turno de la Banda de Música Ciudad de Dos Hermanas. La Agrupación Musical Nuestra Señora de la Estrella interpretó marchas que nos recordaba al Domingo de Ramos en la esquina de la Calle Melliza.
Fueron muchos los momentos los vividos, pero quedarán también para el recuerdo el paso por la calle Divina Pastora. Los vecinos adornaron con mucho cariño con arcos y flores toda la calle. Numerosas petalás y momentos de plegarias en forma de canciones acompañaron el transcurrir por la calle.
Otro de los puntos del recorrido llenos de recuerdos y emoción fue su paso por la calle Nuestra Señora de Valme antes de su entrada en la Parroquia, donde 5 grandes arcos de flores blancas con luces y un mosaico de sal fueron testigos del paso de la Patrona. Esos arcos recordaron a los que se colocaban antiguamente cuando se celebraba la feria de Santiago y Santa Ana.
En torno a las 3 de la madrugada se ponía el broche final con la entrada en la Parroquia de Santa María Magdalena, cerrando una jornada histórica donde se volvió a reafirmar que Santa Ana es el Honor de nuestro Pueblo. Fotografías: Dos Hermanas al Día y Antonio Lozano Berto.
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