A principios de este mes concluyeron los trabajos de restauración que a lo largo del verano se han llevado a cabo en distintas zonas de las pinturas murales de la Capilla Sacramental de la Parroquia Santa María Magdalena, gracias a una subvención otorgada por la Consejería de Turismo - Deporte de la Junta de Andalucía, gestionada por la Hermandad de Valme. Los trabajos, dirigidos por el restaurador nazareno Marcos A. Moreno Acosta, han incluido, entre otros, reposición de mortero, limpieza superficial, fijación y consolidación de los frescos y reintegración cromática sobre las pérdidas de zonas doradas en aquellas partes afectadas por filtraciones de agua y humedades (ya subsanadas anteriormente).
Las pinturas de la Capilla Sacramental de Santa María Magdalena se realizaron en el recinto más antiguo de la iglesia. Construida entre 1719 y 1720 y mandada a construir por el poderoso hidalgo nazareno Don Francisco Domínguez de Rivas. La autoría del retablo sigue siendo un enigma, se atribuye al círculo de José de Maestre y Tomás González Guisado. En cambio sí se conocen los doradores, Diego Sánchez Pizarro y Pedro de Mora Pizarro, concluyendo en 1720.
En la hornacina del retablo se venera la imagen de Nuestra Señora de Valme. En 2021 se realizan labores de conservación y se redescubre la decoración pictórica original del camarín de la Virgen. Forman parte del equipo de restauración Álvaro Robles y Marcos Moreno.
El autor de los frescos es Braulio Ruiz Sánchez, nacido en Valdepeñas en 1911. Se formó en Sevilla y su obra se enmarca en el movimiento artístico denominado Regionalismo. Solo se conservan dos pinturas murales en toda España, fallece en Sevilla en 1967. Los frescos tuvieron una intervención en 1990, apreciándose reintegraciones de forma puntual en distintas zonas y desconociendo informe alguno sobre tal restauración.
Marcos Moreno es Licenciado en Bellas Artes con la especialidad de Restauración y Conservación de Bienes Culturales por la Universidad de Sevilla desde el año 2010, completó su formación realizando prácticas en el Museo de Bellas Artes de Sevilla y en una estancia en Italia de tres meses a través de la Beca Leonardo concedida por el Excmo. Ayto. de Dos Hermanas.
En Dos Hermanas, comienza a realizar el seguimiento de conservación de imágenes procesionales como la imagen del Cristo de la Veracruz y María Santísima del Mayor Dolor junto a su compañera María Jesús Pérez Rivera. Al mismo tiempo conserva las imágenes titulares de la Hermandad del Santo Entierro de Dos Hermanas.
Fuera de Dos Hermanas tuvo la dicha de restaurar en 2021 el primitivo Cristo de La Veracruz de Villaverde del Río, una imagen particular al ser articulada y realizada en la técnica del papelón. Desde hace unos años viene desarrollando labores de conservación preventiva en la Parroquia de Santa María Magdalena, interviniendo en distintas capillas de la parroquia tanto en retablos como en pintura mural.
¿En qué estado se encontró los frescos de la Capilla Sacramental de 1950 de D. Braulio Ruiz Sánchez?
El estado general de los frescos de la Capilla Sacramental es óptimo, con la salvedad de las dos zonas que han tenido que intervenir, dado a que en un periodo de tiempo sufrieron la filtración de agua debido al mal estado de las cubiertas. Al solventar esta problemática se ha podido intervenir directamente sobre ambas zonas.
¿Cuál fue la intervención que realizaste para devolver el esplendor a estas pinturas?
En primer lugar y lo más importante, se ha tenido que fijar y consolidar tanto la pintura como las zonas doradas, se encontraban en muy mal estado. Tras esta fase se ha repuesto mortero puntualmente en zonas dónde se había perdido y para finalizar se ha reintegrado todas las lagunas bajo la técnica del rayado o “rigatino” en italiano. De manera que se ha devuelto la lectura original de la obra consiguiendo eliminar al mismo tiempo esos verdes del dorado oxidado a causa de las filtraciones.
¿Se encontró con alguna sorpresa durante la restauración?
Sí, se localizó una firma del autor rayada sobre la pintura, algo raro ya que su firma y año de realización se encuentran en uno de los muros de la capilla.
¿Con esta restauración y la acometida en 2021 del retablo camarín de la Virgen de Valme y otros elementos, queda concluida la restauración en su totalidad de la capilla?
Se ha realizado una intervención puntual dando mayor énfasis a la urgencia de distintas zonas a recuperar o a paralizar la pérdida de material. Por lo tanto, no se puede decir que se ha restaurado por completo la capilla. En estos últimos años se ha venido desarrollando sobre esta capilla una estrategia importante basada en el seguimiento y control de los riesgos de deterioro llamado conservación preventiva y esto se debe gracias a la concienciación de la Junta de Gobierno de la Hermandad de Valme y de nuestro párroco.
¿Qué recomendación hace como profesional para conservar lo mejor posible el patrimonio?
Como he dicho anteriormente, la conservación preventiva es muy importante y no se basa en una intervención directa sobre el patrimonio. Indirectamente podemos conservar a través de distintas acciones, como el control de la humedad, temperatura, luz, control de plagas de insectos como la carcoma o termita, esto hace que también que aminore el costo de futuras intervenciones, puesto que estamos frenando el deterioro. Por eso es importante realizar un seguimiento exhaustivo de nuestro patrimonio.
¿En lo personal que ha supuesto para ti restaurar la Capilla Sacramental?
Para mí no ha sido una obra más, cada obra tiene sus patologías y esta en cuestión tenía zonas muy debilitadas que incluso con el más mínimo roce se desprendían, por lo que ha sido un reto frenar esos daños. En definitiva, estoy muy contento de haber realizado esta intervención sobre estas pinturas que merecen una puesta en valor en el patrimonio de la ciudad.
¿Algo más que quisiera compartir con nosotros?
Quisiera aprovechar estas líneas para agradecer sobre todo a la Junta de Gobierno de la Hermandad de Valme y a Don Manuel Sánchez de Heredia, nuestro párroco, por confiar en mi persona nuevamente, y a la Junta de Andalucía que ha financiado gran parte de la restauración. Como he dicho anteriormente, la conciencia conservadora de nuestro patrimonio está aumentando y eso es digno de destacar, siempre y cuando se acuda a los profesionales titulados de la materia.
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