Memorias de un caracol, Todo un fenómeno

Largometraje

La sociedad actual busca divertirse y desvanecerse de la realidad. Vemos películas o series en nuestro tiempo libre que nos entretengan y nos despierten emociones. Pero, ¿Qué pasaría si la historia que nos cuestan es realista, es totalmente opuesta a los cuentos que nos contaban de niños, es dolorosa y además es espectacular? Pues no hace falta que lo imagines porque aquí la tenemos: "Memorias de un Caracol".

Memorias de un Caracol

"Memorias de un caracol" es un largometraje de origen australiano. Es dirigida por Adam Elliot qué también es el director de "Mary and Max". Durante el largometraje, conoceremos todos los detalles de la vida de Grace, nuestra protagonista. Grace, como se puede ver en el cartel oficial de la película, está obsesionada con los caracoles. Lleva siempre un gorro con ojos de caracol, sólo lee libros ambientados en caracoles y, sobre todo, le encanta coleccionar figuritas. ¿De qué?, os preguntaréis. Pues sí, de caracoles.

Mary and Max

A lo largo del largometraje, sentiremos una gran variedad de emociones, entre ellas: la tristeza, la soledad, la angustia o incluso, la rabia. El director tiene una forma original de expresar sus emociones a través de la pantalla. Empatizaréis muchísimo con la protagonista aunque sus problemas no tengan nada que ver con los vuestros. Pero la narración hace que sintamos todo lo que observamos. Es una película que, personalmente, no la recomiendo a un público infantil. Trata temas de la vida adulta que los niños no van a entender y posiblemente se aburran.

El director consigue hacernos llorar y reír. Eso, es gracias no sólo a la historia en sí, si no a la técnica que le acompaña, los personajes, la gama cromática, la música... que es precisamente de lo que vamos a hablar a continuación.

Arte y proceso

Adam Elliot se caracteriza por su tan distintivo estilo de stop motion. Esas formas tan macabras y orgánicas de crear a sus personajes. En todos sus largometrajes, utiliza tonos grisáceos y marrones para recrear las escenas mas tristes o incluso, las más alegres. Posee una visión única a la hora de elegir la gama cromática exacta.

Los guiones de sus películas suelen contar la vida de algún ser con problemas, suele tratar enfermedades como la depresión, la infelicidad... siempre desde una manera respetuosa, pero realista.

Memorias de un caracol

Todos los largometrajes realizados con esta técnica requieren una gran cantidad de trabajo. En este caso, todos los personajes, objetos, props, escenarios se han construído a mano siendo el principal material, la plastilina. Esta forma de crear stop motion se llama clay-motion, y es una forma muy difícil de animar.

En el vídeo se muestra un poco el proceso que han ido siguiendo a lo largo de la producción. Hay unos momentos en el que nos muestran el método por el que se han ido organizando para grabar los distintos planos. En el caso de Adam Elliot, han colocado todo el storyboard en una gran pared, así se puede visualizar de una sola vez toda la historia.

Memorias de un caracol

Esta semana hemos descubierto un universo nuevo gracias a esta gran director. Os animo a ver sus películas y sobrevivir emocionalmente al intento. Son unos largometrajes que no os podéis perder.

Memorias de un caracol

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