Redacción DHad

Estreno destacado: Cazafantasmas, imperio helado

Cazafantasmas: imperio helado (2024). Director: Gil Kenan. Intérpretes: Paul Rudd, Carrie Soon, Finn Wolfhard, Mckenna Grace, Kumail Nanjiani.

SINOPSIS: El nuevo grupo de cazafantasmas aparecido en la anterior entrega se establecen en Nueva York cuando una nueva amenaza sobrenatural se cierne sobre la ciudad. Este grupo se asociará con los científicos que crearon todos los artefactos para capturar fantasmas y se enfrentarán a este nuevo desafío.

OPINIÓN: La vuelta a la fórmula clásica en Cazafantasmas: más allá (2021, Jason Reitman) donde la nostalgia jugó bastante en su acogida, tuvo el suficiente éxito y repercusión para producir esta secuela donde quieren hermanar toda la saga, haciendo un conjunto más compacto y sólido, dejando fuera a la entretenida Cazafantasmas (2016, Paul Feig).

Volvemos a recuperar los tropos ya clásicos que recuerdan a la manera de contar historias cómicas con dosis de acción y terror blandito que fueron una de las marcas indelebles a los años 80 del siglo XX, esa década que se ha grabado a fuego en la cultura pop. Una película de aventuras que funciona a las mil maravillas como elemento de evasión para disfrutar en la sala de cine.

Actores tan carismáticos como Paul Rudd, que transmite un buen rollo sin esfuerzo; estrellas en ciernes como Finn Wolfhard (salido de Stranger things (2016-) serie que tiene muchos elementos en común con estas cintas) o jóvenes talentosas como McKenna Grace y actores ya asentados como los legendarios Dan Aykroyd y Bill Murray, dan solidez a la película, ya que cada uno de ellos aporta ingredientes que suman a la trama de cambio generacional.

Al contrario que la entrega anterior, aquí no es necesario dedicar tiempo para presentar a los personajes principales, así que la acción está presente desde el primer momento, con Gil Kenan sustituyendo a Jason Reitman como director, y dotando de personalidad las diferentes secuencias de acción o suspense, dando muestras de su buen hacer en este aspecto, ya que ha trabajado tanto en animación, con la notable Monster house (2006); como en el terror para adolescentes con la serie de Scream (2015-2016).

Relevo generacional que disfrutará cualquiera que busque evasión y diversión.

CONEXIONES: Los 80 y las comedias de terror.

Ya es un latiguillo en esta sección decir que en los comienzos del cine ya se inventó todo lo que explotaría más tarde. Y las comedias de terror no iban a ser una excepción. La clásica década de los años 80 (1980-1989) fue un filón para esta categoría, estrenando multitud de películas que hoy son consideradas clásicos o cintas de culto, pero la industria ya había explorado esta mezcla de géneros, dando como resultados comedias que algunas veces rallaban en la parodia, que hoy en día son duras de ver, ya que el humor ha evolucionado desde entonces.

El dúo cómico Bud Abbott y Lou Costello hicieron sus pinitos en esta mezcla de géneros con Agárrame ese fantasma (1941, Arthur Lubin), en la que esta pareja hereda una casa que parece estar encantada. Comedia que no quiere caer en lo paródico, como hicieron con sus siguientes películas en las que se mezclan con los Monstruos Clásicos de la Universal (Drácula, Frankenstein, etc.) a partir de Abbott y Costello contra los fantasmas (Charles Barton, 1948). Otro cómico de la época, Bob Hope, estrenó una comedia de terror, El gato y el canario (1939, Elliot Nuggent), que también hace mofa de las casas encantadas.

Pero como esto va del cine cómico de terror de los 80, vamos a hacer un listado con aquellas películas destacables de la década. Una labor difícil en la que dejamos de lado películas conocidas por todos, como Gremlins (1984, Joe Dante) o Bitelchús (1988, Tim Burton), y bajamos un escalón para dar a conocer películas algo más olvidadas.

Continuamos con el tropo de casas encantadas con House, una casa alucinante (1986, Steve Miner), en la que un artesano en el género de terror como Miner es capaz de crear momentos de comedia en esta historia de un joven, un escritor que ha sufrido una terrible pérdida, que se instala en la casa de su tía recién fallecida para escribir y donde experimentará sucesos paranormales y cómicos. Exitazo que generó en tres secuelas más irregulares.

También había hueco para traer de nuevo a los monstruos clásicos de la literatura y que Universal lanzó al estrellato en los años 30-50 con un estilo para la posteridad cinematográfica, pero esta vez abrazando la comedia y la aventura juvenil. Una pandilla alucinante (1987, Fred Dekker) cuenta la historia de un grupo de chavales en un pequeño pueblo que se enfrentarán a Drácula, La momia, El hombre lobo y más seres sobrenaturales cuando un amuleto los despierte. Nostalgia ochentera. Al alimón de este título, los que fuimos niños en los 80 y 90 disfrutamos de una película española que tiene un argumento similar: Buenas noches, seños monstruo (1982, Antonio Mercero), donde una pandilla entra en un castillo donde moran estos seres malvados. Una aventura patria que caló hondo en esos años.

Fred Dekker es un director que también le dio una visión diferente a los zombis en el cine de terror con El terror llama a su puerta (1986) mezclándolos con la comedia y la ciencia ficción en esta historia de unas babosas extraterrestres que convierten a la gente en zombis durante el baile de fin de curso tradicional estadounidense. Divertida y con unos efectos prácticos antológicos.

Zombis en el género cómico tiene una película de culto escrita y dirigida por todo un titán del género fantástico: Dan O'Bannon. Director y guionista, creador del mítico xenoformo de Alien: el octavo pasajero (1979, Ridley Scott); guionista además del clásico moderno Desafío total (1990, Paul Verhoeven), O´Bannon escribió y dirigió El regreso de los muertos vivientes (1985), donde cuenta que los hechos contados en la obra maestra La noche de los muertos vivientes (1968, George A. Romero) sucedieron de verdad y está volviendo a ocurrir cuando un barril lleno de un líquido extraño se rompe y el suelo de un cementerio lo absorbe haciendo que los muertos se levanten de su tumba. Cinta simpática con unos grandes momentos cómicos y de suspense.

El hombre lobo tuvo un resurgir en esta década con De pelo en pecho (teen wolf) (11985, Rod Daniel), con Michael J. Fox encarnando a un joven que descubre que es un hombre lobo y eso le ayuda a crecer en popularidad en el instituto. Divertida y con toque románticos juveniles, un exitazo que provocó una secuela muy floja, De pelo en pecho II (1987, Christopher Leitch) y una serie moderna que utiliza el concepto inicial y lo desarrolla creando una mitología propia e interesante: Teen Wolf (2011-2017).

Ya acabamos con la, posiblemente, mejor adaptación de la novela de Bram Stoker Drácula: Noche de miedo (1985, Tom Holland). Un equilibrio entre la comedia y el terror bien hilado, que recupera al vampiro otorgándole la seducción y el peligro mortal que la novela describió. Un joven, Charley Brewster, descubre que su nuevo vecino es un vampiro y pide la ayuda a un actor que interpreta a un cazavampiros en la televisión para que le ayude a derrotarlo. El vampiro, llamado Jerry Dandridge, interpretado de manera grandiosa por Chris Sarandon, que le da el toque sexual y el peligro que tiene de un modo maravilloso. Una película de vampiros que está catalogada como comedia pero que tiene secuencias de suspense y terror más potentes que otras obras solo "de miedo".